Armonía en Crepé y Muselina: La Elegancia Innata de Carmen Reflejada en su Vestido
El vestido de Carmen, confeccionado con una precisión que roza la poesía, utiliza el crepé no solo como tela, sino como un lienzo sobre el que se dibuja su personalidad. Las mangas largas, con sus líneas rectas de entredós en la zona inferior, se convierten en una extensión de su expresión, mientras que el escote trasero en diamante es un espejo del valor y la belleza que Carmen lleva dentro.
El escote delantero, que sigue el mismo diseño en “V” que las mangas, no es menos que una ventana a la confianza y la belleza auténtica de la novia. El corte inclinado en la cintura hacia el centro delantero de la falda es un guiño a la modernidad, una forma de celebrar la figura de Carmen y de extender visualmente la longitud de sus piernas.
La falda, que se despliega en un corte en “A”, es una oda a la silueta clásica, terminando en una cola que no solo prolonga su estatura, sino que también simboliza el camino que se despliega ante ella. Sobre el vestido, una capa de muselina de seda se sostiene en el cuello, aportando no solo una textura rica y una interacción de transparencias, sino también la longitud de la cola que acompaña a Carmen en su camino al altar.
Fotógrafo: José Ruez